Julia Stiles, recordada por protagonizar clásicos de las comedias románticas como 10 cosas que odio de ti, Espera al último baile y El príncipe y yo, fue una de las figuras más representativas del cine juvenil de principios de los 2000. Su imagen de chica rebelde y carismática conquistó Hollywood, pero en 2005 decidió dar un giro inesperado: se alejó de los reflectores para estudiar Literatura Inglesa en la Universidad de Columbia, en Nueva York.
A partir de entonces, sus apariciones en la pantalla se volvieron esporádicas. «Siempre tengo la sensación de que si dejo de trabajar, alguien ocupará mi lugar», confesó en una entrevista para la revista CHRON. Y así fue. La industria, siempre hambrienta de nuevos rostros, fue dejándola de lado.
Sin embargo, Stiles nunca abandonó del todo el cine. En 2025 debuta como directora con Wish You Were Here, una comedia romántica con tintes dramáticos sobre un encuentro fugaz, un ghosting inesperado y una revelación desgarradora: uno de los personajes padece una enfermedad terminal.
“Lo que aprendí fue a contar historias”, explicó en una reciente entrevista para The Guardian. “Cuando por fin dirigí mi película, mucho de lo que había estudiado se volvió útil”.
Hoy, Stiles regresa no como protagonista, sino como narradora. Y demuestra que, aunque los focos se apaguen, el talento puede encontrar nuevas formas de brillar.