“Primaria Aquiles Serdán, entre la confusión y el abandono: padres denuncian engaños”

Lo que inició como una victoria para los padres de familia de la primaria Aquiles Serdán –quienes lograron frenar el cierre de la escuela y la reubicación de sus hijos a la primaria Miguel Hidalgo– se ha convertido en un nuevo foco de molestia y confusión.

De acuerdo con los testimonios de los tutores, la directora de Servicios Educativos, Ana María Martínez García, les aseguró que finalmente los alumnos permanecerían en la Aquiles Serdán y que serían los estudiantes de la Miguel Hidalgo quienes serían trasladados a este plantel. También se les prometió un reacomodo de maestros para garantizar la cobertura de todos los grupos.

Sin embargo, al llegar esta semana a la escuela, los padres encontraron una realidad muy distinta: no había maestros asignados a los grupos. “La directora no sabe decirnos quién se va a quedar con cada salón, todo quedó en el aire”, expresó una madre inconforme.

Denuncian que detrás de esta confusión hay un presunto conflicto de intereses, ya que la maestra Laura Patricia Silva Cruz, proveniente de la primaria Miguel Hidalgo, es esposa de Juan Carlos Torres Cedillo, Secretario de Educación.

“Con razón hicieron lo que quisieron con nosotros, por eso la SEGE nunca nos dio una respuesta clara”, reclamó un padre de familia, acusando que la reubicación obedece más a relaciones personales que a criterios educativos.

Otra de las denuncias hechas por los tutores es que la supuesta buena infraestructura de la primaria Miguel Hidalgo —argumento utilizado para justificar inicialmente el traslado— no corresponde a la realidad. “Algunos papás fueron a revisar y vieron que las instalaciones no están en buen estado. Eso también nos lo quisieron ocultar”, señalaron.

Ante la falta de certeza y de personal docente, muchos padres reconocen que se han visto obligados a buscar otros espacios escolares para sus hijos, pues, a unos días de iniciar el ciclo escolar, no tienen la seguridad de que la Aquiles Serdán pueda operar normalmente.

Mientras tanto, dentro del plantel, un profesor identificado solo como “el profe Coco” ha estado intentando convencer a los padres de que acepten los cambios, aunque la molestia y el desconcierto siguen creciendo.