El lanzamiento del “Oaxaca Slip-On”, un híbrido entre huarache artesanal y sneaker creado por Adidas y el diseñador Willy Chavarria, desató una fuerte polémica internacional.
El diseño, inspirado en la tradición oaxaqueña pero sin participación de la comunidad de Villa Hidalgo Yalálag —reconocida por sus huaraches— fue señalado como apropiación cultural por el propio gobierno de Oaxaca e incluso por la presidenta Claudia Sheinbaum.
Ante la presión, Adidas y Chavarria ofrecieron disculpas públicas, retiraron los materiales promocionales y anunciaron que ya dialogan con las comunidades para reparar el daño.
El caso deja una lección clara: inspirarse no equivale a colaborar, y el respeto a los creadores originales es indispensable al recurrir a la riqueza cultural de México.