La rosca de Reyes marca el fin del llamado maratón Guadalupe-Reyes. Se trata de una de las tantas tradiciones que siguen las familias mexicanas y marca el preámbulo del Día de la Candelaria.
Durante este día, las familias se disponen a compartir de este pan redondo u ovalado adornado con frutos cristalizados, ate de colores y pasta de concha azucarada.
Está celebración se lleva a cabo en honor a los reyes magos, Melchor, Gaspar y Baltasar en su llegada a conocer al nacido Jesús, quienes le ofrecen como regalos, oro, mirra e incienso.
En México, la rosca de Reyes comenzó a realizarse con la llegada del trigo y para el siglo XVI ya había producción en panaderías de la Nueva España; sin embargo, estos panes tardaron mucho tiempo en aparecer en los hornos.
La costumbre de hacer roscas tiene su origen en la Edad Media en Europa, pero a México fue traída por los españoles y su costumbre se arraigó primero en el centro del país para luego difundirse por todo el territorio.
Su popularidad en el país comenzó en la década de los 30 del siglo XX, cuando se registró una migración de personas españolas que huyeron de la Guerra Civil en su país.
En México la rosca se enlaza a la festividad de la Candelaria, por lo que si te sale un muñequito en ella tendrás que estar preparado para hacer los tamales el próximo 2 de febrero.
Con información del Financiero
También puedes leer: Alcaldesa Leonor Noyola comparte monumental rosca de reyes con soledenses
