Ibtissam “Betty” Lachgar, activista marroquí por los derechos humanos y de la comunidad LGBT+, fue detenida tras publicar una foto en redes sociales usando una camiseta con la frase “Alá es lesbiana” en árabe.
La Fiscalía de Rabat abrió una investigación por presuntas ofensas a la religión islámica, conforme a las leyes marroquíes de blasfemia, que contemplan hasta cinco años de prisión por críticas públicas al islam. La publicación generó una ola de insultos, amenazas de muerte y llamados a su lapidación.
Lachgar, cofundadora del Movimiento Alternativo por las Libertades Individuales (MALI), denunció violencia verbal y sexista y calificó al islam como “fascista, falocrático y misógino”. Su caso reaviva el debate sobre libertad de expresión, derechos individuales y los límites de la legislación religiosa en Marruecos.