La Fuerza Espacial de Estados Unidos realizará el primer ensayo militar de la historia de un combate espacial en la órbita terrestre.

Con esto, buscan poner a prueba la capacidad del ejército de repeler la agresión de un enemigo, en una misión denominada Victus Haze.

El ensayo implica el que un satélite realice maniobras sospechosas o amenazantes cerca de una nave espacial estadounidense.

Para su ejecución han unido fuerzas con las empresas Rocket Lab y True Anomaly para desarrollar un escenario realista de respuesta a amenazas.

La misión Victus Haze forma parte de una serie de misiones militares dedicadas a validar las capacidades del Espacio Tácticamente Responsivo, TacRS por sus siglas en inglés.