El pasado domingo, la CDMX se pintó de amarillo neón durante el V Recorrido del Movimiento de Personas con Discapacidad, una movilización que reunió a cientos entre abrazos, consignas y un amor colectivo que se sentía desde el Ángel de la Independencia. Pero entre todo ese brillo, hubo una ausencia que todos notaron: Guz Guevara, activista potosino, creador del famoso pañuelo fosfo* —sí, ese símbolo neón que ya es bandera nacional contra el capacitismo— y uno de los fundadores del movimiento.
¿Por qué no estuvo Guz? La razón duele: accesibilidad que no existe
Guz radica en la CDMX, pero no pudo asistir porque sigue recuperándose del accidente que sufrió este año… un accidente provocado precisamente por la falta de accesibilidad en la ciudad. Por fuera parece estar bien; por dentro, su cuerpo aún no se recupera. Su ausencia se sintió, se extrañó y, sobre todo, recordó por qué esta lucha sigue siendo urgente.
Lo que muchos no saben: Guz es una pieza clave del movimiento
Para quienes no tienen el contexto:
* Es cofundador del Movimiento de Personas con Discapacidad en México.
* Creó el pañuelo fosfo, hoy símbolo nacional de resistencia.
* Es conductor del programa “80 Millones” en Canal Once.
* Fue reconocido por el Conapred con el Premio Rostros por la Igualdad.
* Y además es potosino, de San Luis Potosí, llevando su activismo hasta la capital.
Su visión transformó el modo en que se habla de discapacidad, interseccionalidad e inclusión en México. Por eso su ausencia en la marcha fue un recordatorio contundente: la inclusión aún no llega para todos.
La marcha crece, pero la deuda también
Aunque el recorrido estuvo lleno de energía y comunidad, la realidad es clara: Falta acceso a salud, educación, empleo, trato digno y cero discriminación. Falta que el tema no se recuerde solo un día. Falta que las ciudades sean accesibles para todos. Falta muchísimo.
El V Recorrido fue hermoso, sí. Pero también dejó una lección poderosa: Si uno de los líderes más importantes del movimiento no puede salir a marchar por falta de accesibilidad, entonces la lucha sigue lejos de terminar. Guz no estuvo, pero su símbolo, su fuerza y su historia caminaron con todas las personas. Y hasta que la dignidad se haga costumbre, seguirá resonando la furia disco.