El alcalde capitalino, Enrique Galindo Ceballos, respondió al PRI, luego de que el Tribunal Electoral del Estado (TEESLP) anuló la elección de Sara Rocha Medina como dirigente estatal del partido tricolor. Aunque negó haber operado tras bambalinas la serie de impugnaciones, Galindo respaldó el fallo del Tribunal al afirmar que se trata de una resolución democrática que da la razón a militantes cuyos derechos político-electorales fueron vulnerados, incluyéndose a sí mismo, ya que fue expulsado del PRI a finales de 2024.
“Los partidos no son de ocurrencias. Si te saltas la ley, hay consecuencias jurídicas, y eso pasó con la elección de la dirigencia”, afirmó Galindo.
Desde el PRI, la respuesta no se hizo esperar. En rueda de prensa, el Comité Directivo Estatal acusó directamente a Galindo (aunque sin decir su nombre) de orquestar las impugnaciones a través de un despacho jurídico pagado por el Ayuntamiento capitalino. El señalamiento fue que los tres militantes favorecidos por el fallo serían funcionarios municipales y parte del grupo político del alcalde. “Todo esto tiene un solo origen: la intromisión del presidente municipal”, acusó Alberto Rojo Zavaleta, secretario técnico del Consejo Político Estatal.
A pesar del choque frontal, Galindo evitó asumirse como priista, señalando que sigue impugnando su expulsión, pero dejó claro que no se ha afiliado a otro partido y que le agrada ser visto como independiente. Mientras el PRI prepara una impugnación ante la Sala Regional Monterrey.