Por: José F. Arellano Covarrubias
La película animada del aclamado director basada en el clásico cuento “pinocho” de Carlo Collodi, refresca la visión ante la pantalla grande.
El cineasta mexicano toma lugar en la famosa historia junto a la leyenda del stop motion Mark Gustafson, demostrando su cariño y dedicación a la obra ya que fue parte fundamental de su niñes. El film fue presentado en el Festival Internacional de Cine en Londres este fin de semana pasado, logrando cautivar a todo el público.
La crítica es contundente con el largometraje dando una de las mejores recepciones en el año, reflejando su tan apreciada visión que deja en el cine, en palabras de Del Toro, le enfurecía esa parte de la historia en la que el célebre muñeco de madera que cobra vida sufre un duro camino por no obedecer; por eso, su versión celebra esa desobediencia de los niños como virtud y no como defecto.
La película cuenta como uno de sus proyectos más íntimos, aunado la reciente perdida de Guillermo del Toro, la obra es una insignia llena de amor y cuidado que enaltece la perspectiva del director, considerada ya como una conmovedora obra maestra de stop-motion.
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