Después de que se detectaran una nueva cepa de COVID-19 en Jalisco, que ya ha sido denominada E484K; el infectólogo y ex director del OPD Hospital Civil de Guadalajara, Héctor Raúl Pérez Gómez detalló que esta nueva variante tiene altas posibilidades de que se haya desarrollado en suelo mexicano, ya que, de los cuatro pacientes detectado con esta mutación, solo uno tuvo contacto con alguna persona extrajera.  

Posteriormente, Pérez Gómez señaló que esta nueva variante podría estar en más ciudadanos, ya que las pruebas para la detección de esta, se aplica aleatoriamente; el infectólogo puntualizó que «el hecho de que se hayan detectado en cuatro personas no significa que hayan sido las únicas que lo presentan o que puedan estar presentando en este momento, porque no en todos los pacientes que se diagnostican con Covid-19 se realizan estudios para determinar variantes o mutaciones del virus».

Por otra parte, el director general del Centro Nacional de Programas Preventivos y Control de Enfermedades, Ruy López Ridaura exteriorizó que la Secretaría de Salud aún no confirma que los cuatro casos registrados en Jalisco, sean correspondientes a una mutación mexicana del virus SARS-CoV-2.

Y detalló que ya se descartó que esta variante corresponde a la detectada en Sudáfrica o en Brasil, por lo que “una variante mexicana, que tenemos que caracterizarla en sus componentes importantes, lo que normalmente se busca en las nuevas cepas que son a veces combinaciones de varias cepas que pueden tener el virus que se encuentren de manera consistente en varios individuos y una vez que se empiece a estudiar lo primero que se debe definir es qué características tiene, si la cepa tiene algo diferente y nuevamente, la primera prioridad es buscar si son más virulentas, y eso requiere un estudio”.