La actriz Sydney Sweeney anunció una colaboración poco convencional con la marca de productos de cuidado personal Dr. Squatch: una edición limitada de jabón hecha con agua que, según la empresa, fue utilizada para bañarla.
La idea surgió tras un anuncio previo de la actriz en el que aparecía duchándose, lo que generó comentarios virales de usuarios dispuestos a comprar —e incluso beber— esa agua. Dr. Squatch decidió capitalizar el furor y convertirlo en un producto real.
El jabón, que estará disponible a partir del 6 de junio por 8 dólares, promete una fragancia inspirada en la naturaleza: pino, musgo y notas de campiña. Como parte de la promoción, la marca lanzó un sorteo exclusivo para 100 personas mayores de 18 años.
Aunque algunos lo ven como una estrategia de marketing ingeniosa, otros lo consideran un ejemplo más del límite cada vez más difuso entre celebridad, consumo y fetichismo digital. Como siempre, el público tiene la última palabra.